– Cepillarse los dientes y encías a diario, siempre después de las comidas, ya que algunos alimentos pueden variar el pH de la saliva que es la encargada de evitar la acumulación de sarro.
– Escoger un cepillo de dientes y pasta adecuada.
– Utilizar hilo o seda dental, es fundamental para eliminar restos de alimentos acumulados entre los dientes que no conseguimos eliminar con el cepillo dental, es recomendable mínimo una vez al día.